La playa de las cuevas, del paraíso o de las palomas, es la más bonita amplia y tranquila de Asilah. Allí, en los meses de verano, hay numerosos chiringuitos donde te alquilas una tumbona y una sombrilla por cicuenta dirhmas y echas el día estupendamente. A la playa puedes llegar en taxi o en coche de caballos, el precio es el mismo 200 dirhams ida y vuelta y se paga siempre al final del día (por lo que pueda pasar).

A nosotros nos encanta ir al chiringuito la Perla del Atlántico, que lo regenta Said Haddaoui, una gran persona honrada y trabajadora. Allí se come bien un tajine o unas sardinas, o los productos frescos que traiga del mercado. le puedes decir de un día para otro lo que quieres y ellos te buscan lo mejor que haya entrado ese día.

Si vais en temporada, no dejéis de ir a visiar esta playa, seguro que os encantará. Si quieres saber más, pincha aqui.

El mercado de Asilah, se encuentra a la sombra de los eucaliptos de la Avenida de Hassan II, y en él desemboca un río de gente. Con telón de fondo de las murallas, es el lugar donde se comercia con frutas, verduras, especias, cereales e infinidad de productos del campo. Es un punto de reunión obligado para los lugareños y para los forasteros que quieran vivir el tumultuoso mundo árabe.

Iglesia de San Bartolomé Construida por un sacerdote franciscano procedente de Galicia. Consta de una fría y espaciosa nave nave interior de estilo colonial español. La capillita de las monjas es de estilo morisco, con plegarias comunes al islamismo y al cristianismo escritas en árabe. Es una de las pocas iglesias de Marruecos a la que se le permite tocar la campana para anunciar la misa de 11:00 hr. de los domingos.

La ciudad vieja y sus murallas: mandadas a construir por Alfonso V de Portugal, las murallas rodean a toda la ciudad antigua. Tienen tres puertas que dan acceso a la medina: Bab Homar, la Puerta de Tierra donde se pueden ver los cañones portugueses que identificaban a sus reyes. La Puerta del Mar, llamada también Bab el Bahar. El silencio y la quietud reinan en esta parte de la ciudad mientras que por sus calles pasean mujeres con grandes cestos en la cabeza, hombres con pollos vivos y algunas mujeres luciendo unos grandes sombreros de paja. Por último está la Puerta de la Kasbah, las casas blancas con las puertas pintadas de azul índigo y verde esmeralda parecen la obra de unos niños traviesos

Palacio de Raisouli, llamado también Palacio de la Cultura, ofrece el interés de haber sido construido por un pintoresco personaje en 1906.Se encuentra en perfecto estado de conservación y aunque antes se visitaba ahora se utiliza sólo para los festivales interculturales de agosto de Asilah. Mulay Ahmed er Raissouli comenzó su carrera a finales del XIX como bandido de las montañas del Rif, pero pronto pasó a ser un asesino de tal calibre que tenía atemorizada a toda la población de Tánger y Tetuán. Se autonombró pachá de Asilah, pero en 1899, cuando tenía 23 años, fue arrestado por el sultán y enviado preso a Essaouira. Una vez liberado volvió a delinquir y a robar. Su mejor negocio era el secuestro de occidentales. Escoltado por su banda se dedicó a la extorsión de personalidades de la época. A cambio de su promesa de buena conducta fue nombrado gobernador de Tánger, pero su comportamiento estaba muy lejos de ser el propio de su cargo. Por ello las potencias europeas forzaron al gobierno marroquí para que lo capturase, pero no lo consiguieron. España, durante la época del protectorado, intentó utilizar a Er Raissouli para mantener a raya a las tribus rifeñas. Madrid invirtió mucho dinero y militares en el intento, pero fue en vano y continuó usando sus armas contra los españoles ocasionándoles severas derrotas. Falleció en abril de 1925 de muerte natural.

Had Gharbia: Mercado de los domingos, situado a 14 km. de Asilah. Dirección Tanger pasado el hotel Khaima y el puente tomad el cruce a la derecha. En la plaza principal del pueblo hay un cafetín con una terraza grande donde podeis refrescaros con un té y si preguntais al camarero por Ilias podréis degustar los aromas del kiff. Mercado campero donde puedes comprar fruta, verdura, especias, jenna y artesanía del lugar.

Tnine Sidi El Yamani: Zoco de los lunes, situado a 25 km. de Asilah. Dirección Larache a unos 10 km. llegais a un cruce donde comienza la autovía, la dejais a la derecha y tomais la desviación de la izquierda a Tetuán. A 2 km. justo pasada la gasolinera, desvío a la izquierda; subis una cuesta de ~3 km. y llegais al zoco de Tnine

Mercado donde podeis encontrar de todo, desde artesanía a frutas, pero especializado en animales (vacas, cabras, burros, caballos, camellos, etc.)

Asilah: Mercado de los jueves, situado junto al antiguo campo de fútbol junto a la carretera general Tánger-Rabat. Curioso de ver porque vienen gentes del interior a vender sus productos.

De origen fenicio, las primeras fuentes históricas de Asilah son la fundación de la ciudad por conquistadores árabes hacia el siglo IX, junto a una ensenada de arrecifes, cerca de la antigua ciudad de Zilil, de la que deriva su nombre.

Durante la edad media y la edad moderna ha tenido una historia muy agitada vinculada a la de Tánger.
Sufrió dos veces incursiones normandas a mitad del siglo IX, para saquear sus riquezas de cereales.

Asilah Fue reconstruida por el califa Omeya Al- Hakem II, que construyó una muralla para protegerla de posibles ataques. También construyó una mezquita de cinco naves.

Tuvo una vida apacible en el siglo XII, ya que se abrió al comercio con occidente y conoció cierta prosperidad.

Los wattasíes tuvieron en ella uno de sus principales puntos de apoyo en la lucha por el poder.
En 1471 fue tomada por los portugueses y permaneció bajo su poder hasta el año 1550. Fueron ellos quienes reconstruyeron las murallas, las fortificaron con sólidas torres y edificaron un alto torreón que servía de atalaya.

Las guarniciones atrincheradas en esta fortaleza sufrieron innumerables hostigaciones por parte de los wattasíes y del príncipe de Xauen, Mulay Brahim.

Liberada en 1550, fue ocupada de nuevo por el rey Sebastián de Portugal en 1577, en recompensa por su alianza con el príncipe saadí Mohamed al Masluj.

Asilah fue restituida al rey saadí en 1589, y luego fue recuperada por España, que la retuvo poco tiempo hasta el siglo XVII; poco después fue tomada al asalto por Mulay Ismail en 1691. Fue repoblada por gentes del Rif que construyeron en ella otras dos mezquitas, una madraza y baños. Desde entonces vive una modesta existencia.

En 1906 cayó en poder de Mulay Ali Ibn Raissouli, que se convirtió en su pachá, y luego fue ocupada por los españoles desde 1912 hasta 1956 fecha en que se proclamó el reino de Marruecos.

Casa García

• 51, Rue Moulay Hassan Ben El Mehdi. Tel: 039417465
• Restaurante familiar, con terraza al aire libre, comedor en el interior y abundante oferta de mariscos frescos de la costa y pescado frito con buena relación calidad precio. Tiene la más amplia carta de vinos a precios muy asequibles. Pide la patatas estrelladas, rellenas de gambas con salsa de mariscos. Exquisitas. Estos platos no están en la carta, pero son muy ricos y hay que probarlos.El centollo preparado también está muy rico y llenos de coralEstá a dos minutos andando del Hotel Zelis y pleno paseo marítimo. No puedes marcharte de Asilah sin visitarlo, ojo es el más carito de Asilah.

Casa Pepe

• 8, Plaza Zelaka. Tel: 039417395
• El más famoso de Asilah, regentado por Pepe de Almería, está situado frente a la muralla y en pleno centro neurálgico en el que podrás degustar una amplia variedad de pescados a la plancha o fritos, de una frescura indiscutible. Cuenta en su primera planta con un salón comedor especialmente indicado para grupos numerosos. Se recomienda reservar mesa los fines de semana. Es uno de los pocos sitios donde comer angulas, centollas, percebes y otros frutos del mar siempre con una excelente calidad.

El Espigón

• Av. Moulay Hassan Ben El Mehdi. Tel: 039417157 / 039418839.
• Cherif Mohamed Alaoui El Mrani
• A nuestro juicio otro de los mejores. Exquisito ambiente marroquí. Ingredientes de primerísima calidad. Entre los aperitivos de la casa te ofrecen una ensalada de tomates y pimientos asados, deliciosamente aliñada con aceite y un punto de culantro. Las sillas son un poco altas y a los que somos bajitos nos cuelgan las piernas, pero se está muy cómodo y el servicio es muy rápido y amable. Esta situado a mitad de la avenida y es uno de los lugares más conocidos para comer.

Más informales, y también más baratos son Casa Jimy con los mejores pinchitos de la ciudad, junto al Hotel Zelis y  Al kasaaba en la muralla.

Arabic

• 14, Rue Al Okuhammed.
• Muy curioso y con un gran ambiente intelectual genuino y marroquí 100%

En la Av. Hassan II, junto a la muralla hay numerosos restaurantes con terrazas. Los lugareños van mucho a Assada, esto siempre es un buen síntoma. También está el restaurante Yali, muy buen precio y muy buena comida. Preguntad por Mohammed. El joven camarero, buena gente y servicial como nadie. La comida está muy buena y los precios son muy asequibles